El Peloponeso | Micenas

La Cultura Micénica

Cultura Micénica

La cultura micénica tenía su centro en la Argólida y se desarrollaba en las regiones limítrofes. Todas las regiones parece que estuvieran bajo control de las diversas ciudadelas en las que se concentraba el poder territorial. Las ciudadelas y palacios más importantes, eran Micenas, Tirinto y Midea en la Argólida, Vafio en Laconia, Pylos en Mesenia, Yolcos en Tesalia, Orchomenós y Gla en el Lago Copais, el Cadmeion de Tebas en Beocia y la acrópolis de Atenas en el Ática.

En torno a 1450 a.C. una catástrofe importante golpeó a los palacios cretenses. Todas las edificaciones minoicas de Creta fueron presa de las llamas. Esto quizás fue debido a la invasión de Creta por los micénicos, que aprovecharon las desastrosas consecuencias que sobre Creta había provocado la explosión de la isla de Thira (actual Santorini) 150 años atrás y atacaron y destruyeron todos los centros de poder minoico instalándose posteriormente en Knosós.

Una de las consecuencias de la conquista de Creta fue, sin duda, el incremento del desplazamiento de artesanos cretenses al continente, lo que demuestra la gran influencia que tuvo la cultura minoica en la posterior cultura micénica, como puede observarse en la artesanía y en la decoración a base de frescos de los palacios.

Sabemos de la existencia de palacios micénicos en Tebas, Atenas, Micenas, Tirinto y Pylos; pero existieron sin duda otros más.

Los palacios se construyen entre 1400 a 1300 a.C., cuando se elevan también los primeros muros ciclópeos de las acrópolis de Micenas, Tirinto y Gla.

Sin duda, el mayor de los palacios de la Grecia micénica fue la Acrópolis de Micenas; le siguen Tirinto, Pylos y Tebas. Midea, Orchomenós, Gla, Yolco y Atenas eran también notables centros micénicos y había también otras acrópolis menores.

Los rasgos característicos de la Grecia micénica en su apogeo son los de una población numerosa, con élites muy ricas, que se dedicaba a la producción agrícola (cereales y olivos) y a la cría de ovinos, con una organización económica basada en el almacenamiento de excedentes, su redistribución y su exportación. La sociedad estaba totalmente centralizada y jerarquizada y en ella numerosas actividades dependían del palacio gobernado por un rey, el wanax. Las relaciones entre el continente y el conjunto del mundo mediterráneo se desarrollaron hasta extremos no conocidos hasta entonces en suelo griego.

La Grecia micénica estaba formada por pequeños estados autónomos gobernados por príncipes independientes ligados, tal vez, por vínculos familiares. Estos estados mantienen entre sí una débil relación político-militar y unas costumbres, lengua y religión comunes. La mayoría de las acrópolis están defendidas por gruesas murallas. Sin embargo, algunos importantes centros micénicos no tuvieron fortificaciones, como Pylos, Orchomenós y Yolco.

La Grecia micénica parece haber alcanzado su cénit a finales del siglo XIV a.C. y en los albores del siglo XIII a.C.

Hacia el 1200 a.C. casi todos los grandes centros micénicos del continente son total o parcialmente destruidos. Estas nuevas destrucciones, a menudo acompañadas de incendios, parecen haberse concentrado en los asentamientos palaciales o de importancia comparable. Irán seguidas o acompañadas de numerosos abandonos.

Atenas fue la única que se salvó del desastre que acabó con el resto de los palacios micénicos.

Según J. Hooker, la caída del sistema palacial se debería a conflictos internos que enfrentaron a los estados micénicos entre sí o bien a una “lucha de clases” entre diferentes categorías de población.

Escritura Lineal BCultura MicénicaHistoria de MicenasLa FortalezaTesoro de AtreoPuerta de los Leones
Escritura Lineal BCultura micénicaHistoria de MicenasLa fortaleza de MicenasTesoro de Atreo o Tumba de AgamenónPuerta de los Leones, Micenas